Me imaginaba famosa, viajando por el mundo. O superhéroe, daba igual. No, cantante o actriz no se me ocurrió. Princesa sí, claro, soy mujer después de todo. Me fantaseaba excéntrica, algo loca, especial, y era tímida y silenciosa como una roca. Así se me ocurrió este blog para, bueno, para todo, onda terapia. Me divierto, me reequilibro, y sigo. Ah, me olvidaba! Este es un blog autoreferente.
Me imaginaba famosa, viajando por el mundo. O superhéroe, daba igual. No, cantante o actriz no se me ocurrió. Princesa sí, claro, soy mujer después de todo. Me fantaseaba excéntrica, algo loca, especial, y era tímida y silenciosa como una roca. Así se me ocurrió este blog para, bueno, para todo, onda terapia. Me divierto, me reequilibro, y sigo. Ah, me olvidaba! Este es un blog autoreferente.
Un destino de gloria
Decidí vivir siguiendo mis sueños.
Aunque perezca en el intento
No tiene sentido vivir sólo para respirar. No si puede evitarse.
Sé que tengo un largo largo camino por delante. Sólo espero no desfallecer, saber levantarme ante cada caída, vivir estimulada por el deseo final.
Sé que el día a día puede matar cualquier ilusión, pero pretendo recordarlo cada día.
La comodidad es un error. Puede ser un descanso más que necesario en el camino, pero hay que seguir. No es buena la comodidad sin brillo, sin sueños, sin grandes placeres, sin estímulo permanente.
Mi vida se merece mi esfuerzo.
Proximidad sin intimidad
Como sea... cuánto me cierra!
Qué sentido puede tener mantener una proximidad física si no hay intimidad?
intimidad de miradas
intimidad de caricias, de roces
intimidad de palabras y de silencios
intimidad de pensamientos e ideas (que no son lo mismo)
intimidad de risas, de carcajadas, de diversión, de ridiculez
de llantos, de dolor, y hasta intimidad de enojos y discusiones
intimidad de confianza
intimidad sin verguenza
en definitiva, intimidad de almas y cuerpos...
El sexo, claro, es una buena respuesta...
Es rico el sexo por el sexo mismo, aún sin intimidad, sí...
Pero es que es más rico con intimidad!
Con conocimiento del otro y sabiendo que te conoce, que te sabe, que te ve de verdad
haya o no una relación de pareja
haya o no estabilidad
haya o no formalidad
Estas cosas suelen tener poco que ver con la intimidad. Si a veces hasta conspiran contra ella!.
Quizá sólo los que verdaderamente se aman comparten su intimidad pese al paso del tiempo, pese a los títulos relacionales con que se vinculan, pese a los ritos que les imponen los grupos sociales a los que pertenecen.
Quizá, ojalá, el amor sea una vía para seguir teniendo intimidad pese al inexorable ataque de la rutina y las convenciones sociales...
Intimidad de la verdadera, del cuerpo y del alma, de lo profundo y lo superficial...
Para rescatar al sexo del lugar de desprecio donde parece que lo tiré, aclaremos que lo que arruina al sexo en mi opinión es la proximidad sin intimidad, la proximidad sin contenido...
Es por lejos preferible el sexo puro y llano que la mentira de una intimidad que no existe.
Lo desagradable no es tanto la falta de intimidad, sino esa proximidad que parece intimidad y no lo es...
Ese estar cerca sin ningún sentido, ese verse sin desearse -sin siquiera repudiarse!-, ese hablarse sin comunicarse, ese besarse sin contactarse.
La cercanía vacía
Esa que te deja extrañando al otro aún teniéndolo pegado, esa que te deja siempre solo por más acompañado que estés...
Esa proximidad sin intimidad es el infierno, al menos según yo