Destino o libertad, libertad o destino
son una dicotomía o pueden ir de la mano?
Amo la idea de la libertad, pero a la vez necesito el concepto de destino, esa noción de que hay algo ahí que es mío, para mí.
Que mi libertad me lleve a mi destino!
Pero cuál es mi destino? cómo lo reconoceré cuando me lo encuentre? sabré que es eso? y si ya lo pasé de largo? si lo descarté?
No, supongo que uno lo siente en la sangre.. debe fluir distinto...
Existirá eso, o pido demasiado?
Me dicen que es un error pretender vivir la vida al máximo, pero no puedo hacerlo de otro modo. No le veo la gracia! la vivo, sí, claro, pero sin goce.
Qué sentido puede tener vivir sin vibrar?
Una existencia chata es el infierno hecho realidad.
No lo quiero para mi vida, por más que me lleve a abandonar situaciones más que confortables. No me sale, no es lo mío... lo acepto, porque quién no quiere un poco de paz! algo de comodidad aunque no sea todo perfecto..., sí, yo añoro la comodidad, la paz, pero a la larga termino apartándome si no viene junto con suficiente brillo.
Fantaseo, lo sé.
Pero prefiero correr tras futuros esquivos, que reptar en presentes sin futuro.
Mi destino será correr?
Run Forest, run!!
Destino
Que quién soy?
Agua, viento, fuego, tierra. Un toro. Una mariposa. Una sonrisa. Un águila.
A veces dura, a veces frágil, otras flexible.
El todo en potencia, como todos. El devenir constante. El presente y el futuro.
La libertad? La gloria? La energía? La paz? Sí, eso también soy.
Soy, a fin de cuentas, con escasa humildad, nada más y nada menos que...yo!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me pregunto, tu logras vivir así?
ResponderEliminarinteresante posición la tuya, sobre todo si logras hacerla real. Lo haces?
ResponderEliminarHola.Pasaron años desde estos comentarios, pero también desde que escribí esto y ya puedo responder con verdad y no con ideales: Creo que está en mi naturaleza eso de fluir, de no quedarme quieta -muchos lo critican, incluso-, con lo cual mi respuesta es sí. A veces es tanto esfuerzo que cansa y quiero renunciar, ser normal. Incluso es algo solitario. Pero es más fuerte que mis deseos de estabilidad. Allí, en crecer siempre, en buscar y buscar, es donde, paradójicamente, siento paz, siento plenitud. :)
ResponderEliminarHola.Pasaron años desde estos comentarios, pero también desde que escribí esto y ya puedo responder con verdad y no con ideales: Creo que está en mi naturaleza eso de fluir, de no quedarme quieta -muchos lo critican, incluso-, con lo cual mi respuesta es sí. A veces es tanto esfuerzo que cansa y quiero renunciar, ser normal. Incluso es algo solitario. Pero es más fuerte que mis deseos de estabilidad. Allí, en crecer siempre, en buscar y buscar, es donde, paradójicamente, siento paz, siento plenitud. :)
ResponderEliminar